Pekín dio hoy la bienvenida a las 148 delegaciones nacionales que participarán desde mañana en las pruebas de los Juegos Paralímpicos, con una emotiva ceremonia de inauguración presenciada por los cerca de 91.000 espectadores que abarrotaron el Estadio Nacional y en la que actuaron varios artistas con discapacidad, entre ellos una joven bailarina que perdió una pierna en el terremoto de Sichuan de este año.
El atleta ciego David Casinos abanderó a la delegación española, cuyos futbolistas ciegos portaron la pancarta: "Olé fútbol sala".Samaranch, la infanta Elena, Mercedes Cabrera y Miguel Carballeda presenciaron la ceremonia en el "Nido de Pájaro". Hou Bin, campeón paralímpico de atletismo, subió sentado en su silla de ruedas por una cuerda para encender el pebetero.
La ceremonia contó con la asistencia en el Estadio Nacional, también llamado "Nido de Pájaro", de autoridades como el presidente de China, Hu Jintao; el presidente del
Comité Organizador de los Juegos de Pekín 2008, Liu Qi, y el presidente del Comité Paralímpico Internacional, Phil Craven.
Además, en el graderío del "Nido de Pájaro" también se dejaron ver el presidente de honor del Comité Olímpico Internacional (COI), Juan Antonio Samaranch; la infanta Elena; la ministra de Educación, Política Social y Deporte, Mercedes Cabrera, y el presidente del Comité Paralímpico Español, Miguel Carballeda.
La delegación española fue la primera en llegar a los aledaños del Estadio Nacional, donde todas las expediciones aguardaron el momento en el que tenían que desfilar ante todo el mundo.
Tras un espectáculo de fuegos artificiales y un vídeo con cuenta atrás, la ceremonia de inauguración, dirigida por el prestigioso cineasta chino Zhang Yimou, comenzó puntualmente a las 20.00 horas de Pekín (14.00 en la España peninsular y Baleares) y concluyó poco más de tres horas después.
Liderada por el abanderado David Casinos, el mejor lanzador de peso ciego del mundo, la delegación española desfiló en el lugar 53 de las 148 que participarán en los Juegos Paralímpicos.
En un momento en que el equipo daba la vuelta al estadio, la televisión enfocó a Samaranch, que saludó a los deportistas, mientras que los futbolistas portaron la única pancarta de todo el desfile, en la que se podía leer: "Olé fútbol sala".
Posteriormente, los representantes del equipo español se acomodaron en el flanco derecho del escenario principal, justo frente a los mástiles donde ondearán las banderas de los medallistas de atletismo en el Estadio Nacional de Pekín.
Las delegaciones de Taiwán, Macao, Hong Kong, Alemania y Australia fueron las más aplaudidas por el público, con excepción de China, cuya entrada en el Estadio Nacional fue celebrada fervorosamente por los espectadores agitando pequeñas banderas nacionales y paralímpicas.
ESPECTÁCULO
Después de una hora y media de desfiles, la ceremonia dio entrada a un espectáculo de luz, color y sonido en la que la integración del hombre en la naturaleza tuvo un peso simbólico destacado.
Todo transcurrió alrededor o sobre un "planeta de jade blanco" situado en el centro del Estadio Nacional y el espectáculo contó con la participación de varios artistas con discapacidad, entre ellos una joven bailarina que perdió su pierna izquierda en el terremoto que sacudió la provincia china de Sichuan el pasado 12 de mayo.
Otros fueron un cantante ciego, que concluyó su actuación con las palabras "mi nombre es Yang Haitao. Soy ciego. Mi casa es China. Si puedo ver la luz durante tres días, quiero ver a mi padre, mi madre y a tí, el que más". También aparecieron 300
bailarinas sordas que expresaron con gestos su amor por la vida y un pianista ciego que interpretó una canción mientras a su alrededor se abrían paneles que simulaban las páginas de un libro con elementos identificativos de las cuatro estaciones.
Después, el presidente del Comité Organizador de los Juegos de Pekín 2008, Liu Qi, dio su "más calurosa bienvenida" a los deportistas y entrenadores y destacó que losJuegos Paralímpicos es "un evento glorioso para las personas en todo el mundo. Su espíritu de solidaridad, amistad y paz contribuirán al progreso para construir una sociedad más armoniosa en el mundo".
Por su parte, el presidente del Comité Paralímpico Interancional, Phil Craven, tuvo un emotivo recuerdo a "los millones de chinos que se han visto afectados por sucesivos desastres naturales en la primera mitad de este año" y alabó al Comité Organizador de Pekín 2008 por preparar "unos maravillosos Juegos Olímpicos" y, de lo que se mostró seguro, "unos estupendos Juegos Paralímpicos".
El presidente de China, Hu Jintao, fue el encargado de declarar oficialmente inaugurados los Juegos Paralímpicos, antes de que se procediera al izado de la bandera paralímpica y a la interpretación del himno paralímpico.
La ceremonia llegaba a su fin. Jin Jing, esgrimista en silla de ruedas, apareció en el Estadio Nacional con la llama paralímpica, que dio la vuelta completa hasta que llegó a las manos de Hou Bin, campeón paralímpico de atletismo.
Bin dejó la antorcha en un dispositivo especial instalado en su silla de ruedas y, sentado sobre ella, se dispuso a escalar el Estadio Nacional sobre una cuerda para, cuatro minutos después, prender el pebetero con el fuego paralímpico. El espectáculo concluyó con 15 minutos de fuegos artificiales.