En una primera parte de ensueño el Sevilla sentenció el encuentro. Pulido en propia puerta, Saviola y Luis Fabiano marcaron. Juande fue ovacionado por la grada
Pasa por el mejor momento de la temporada y esta noche lo demostró ante el Getafe en un partido que en principio se antojaba de ni fu ni fa para los intereses locales. Sólo necesitaron cuarenta y cinco minutos los de Juande para certificar un partido en el que los madrileños casi no aparecieron. Fue un rodillo el equipo sevillista, que en el minuto 21 empezó a encarrilar el asunto, con un tanto de Pulido en propia puerta. Diez minutos más tarde Saviola puso tierra de por medio y ya Luis Fabiano en el 39 dio la puntilla a los de Schuster con un inapelable testarazo. Bastó con eso: Este Sevilla funciona, juega bien y, cuando le entran los goles, arrasa.