Fiestas
Cambio de tercio a lo Pascual Gonzalez
Ahí queó. No ha sido ni una chicotá entera. Más bien se nos rajó por la mitad a eso del Miércoles Santo. ¿Quién se acuerda ya de ese día, como no sea por los primores toreros del Baratillo o San Bernardo? Hace tanto tiempo ya del Miércoles Santo, de la última vez que vimos un paso, que parece más bien el Miércoles Santo de otro año y no de este lluvioso 2011. Ha sido una Semana Santa que se ha ganado ser inolvidable por todo lo contrario a como inolvidables se nos quedan otras. Vaya una forma de pasar a la historia. Vaya manera de tirarse los días renqueando y volcándosele la trasera, y acabar sin cuadrar los cuatro zancos a la vez.
