
LA SEMANA SANTA HACE UN SIGLO.
El pasado 25 de Marzo en la docta casa del Excmo Ateneo de Sevilla y dentro del ciclo cofrade de cada martes, se impartió una brillante conferencia por Juan Pedro Recio de La mata con abundantes y desconocidas anécdotas y fotografías de la década de 1920 en Sevilla.
Aquella Sevilla de Joselito El Gallo y los Álvarez Quintero, de artistas como Aníbal González que propician la renovación de la ciudad en pos de la Exposición Iberoamericana de 1929 dónde impera el regionalismo, una nueva corriente estética que conlleva una revolución estética y cofrade pero fiel a sus raíces populares. Sevilla heredera de las estructuras del siglo XVII, contrasta con la pobreza e incultura nunca asimilada y que fue el preludio de la guerra civil. Riadas, pobreza, hambruna, pero grande en obras y proyectos que ya definió Paco Robles: "Sevilla era la ópera de los pobres" donde al lado de los grandes monumentos había chabolismo. Mientras, el Ateneo en el año 1918 crea la cabalgata e impulsa la Generación del 27.
Coexisten 2 plazas de toros, la Maestranza y la Monumental y la dualidad entre Joselito y Belmonte; Sevilla es un escenario físico y sentimental, un marco idóneo para el callejero sevillano, para la semana santa, que se remodeló en estos años. En 1919 se cambia la carrera oficial que va a comenzar en La Campana y se prohíben cantar saetas, sobre todo en Sierpes, debido a los grandes problemas de la acumulación de saeteros que impedían el normal discurrir de los pasos. En 1930 las hermandades pasan de 20 a 45 hasta las 71 que hay actualmente; hay un resurgir de la Semana Santa y se vive una época de oro con Juan Manuel Rodríguez Ojeda que instaura vestir las vírgenes como hoy conocemos. Compositores como Font de Anta con la marcha "Amargura" o "Soleá dame la mano" aupan a la música cofrade a lo más alto. Se hacen nuevas tallas y Castillo Lastrucci impone una imaginería con figuras inspiradas en personajes cotidianos como La Candelaria, San Benito, La Bofetá, la Sentencia, etc..., se renuevan las túnicas y vestimenta de vírgenes de la mano de Rodríguez Ojeda y la ofrebrería con Cayetano Gonzalez. También desaparecieron otras hermandades y empieza la tradición de dar caramelos en Semana Santa y la tradición floral con flores naturales; empiezan a crearse las casas de hermandad que la primera es el Gran Poder y aparece el primer besamanos de la Macarena en 1915 que la acerca al pueblo. Asimismo empiezan a proliferar las bandas de música no como antiguamente que llevaban solo 15 personas sino que ahora llevan hasta 100. Está el descubrimiento de grandes músicos como el brigada Rafael y los vestidores crean moda vistiendo a las vírgenes de hebreas; se crean los programas de Semana Santa en la radio en directo como la primera que se hizo en el Jueves Santo de 1928 de una hora de duración en radio Sevilla, y el primer programa deano que repartía El Correo de Andalucía. Aparece la primera película de Semana Santa en mudo que se llama "Currito de la Cruz" que se estrena en el teatro San Fernando; pero lo más importante ahora mismo es mantener la tradición sin personalismos como apostilló el conferenciante, una brillante exposición con erudición y cercanía que hizo las delicias de los asistentes en la cátedra de Tradiciones Sevillanas que se celebra cada martes en el Ateneo .
Texto de Juan Manuel Rodríguez, y foto de Manuel Campos, miembros de Tradiciones Sevillanas.

