El Chipiona ha puesto fin a una travesía del desierto en Segunda Andaluza que ha durado tres años. Con un empate agónico y ante un público enardecido, los de Carlos Martínez sellaban a mediodía de ayer domingo su vuelta a la Primera Andaluza cuando aún restan tres jornadas para que finalice la competición.
Los azules, que jugaban en casa ante el Tarifa y tenían que estar también pendientes de lo que hiciera el Vejer, quinto de la clasificación e inmediato aspirante a los cuatro puestos que dan derecho al ascenso, se vieron dos veces por debajo del marcador. El descanso se llegó con 1-2 y el conjunto chipionero tuvo que luchar durante toda la segunda parte por lograr el empate, que llegó cuando el partido estaba tocando a su fin.
El encuentro comenzó con un tempranero gol del Tarifa. Al Chipiona le tocó remar contra corriente un buen número de minutos hasta lograr el empate por mediación de Alberto Santos, alegría que duró poco, ya que la formación campogibraltareña volvió a colocarse por delante un instante antes de que llegara el descanso. La segunda parte fue una lucha incesante de los chipioneros por lograr nivelar el encuentro, algo que no llegó hasta el último minuto del tiempo de descuento, cuando el capitán David Lorenzo, recién ingresado en el partido, lograba el gol que ponía las tablas en el marcador de un gran cabezazo a la salida de un córner.
El Chipiona es tercero con 53 puntos, los mismos que el cuarto clasificado, Linense B, y a diez puntos del Vejer, lo que asegura el ansiado ascenso.
Este próximo fin de semana los azules se desplazan a San José del Valle para disputar un encuentro ya sin trascendencia para ellos ante un rival que está en puestos de descenso.