Mª Antonia Domínguez se proclama subcampeona continental en Brest (Francia) y Curro Manchón logra la tercera plaza en la categoría Ligeros.
Con dos puestos de podio ha finalizado este fin de semana la flota del Club Náutico Sevilla el Campeonato de Europa de la clase Raceboard, competición disputada desde el pasado martes en la localidad gala de Brest. A un paso del pleno se han quedado por tanto los tres representantes hispalenses que han acudido a la cita continental, en la que han tomado parte 90 regatistas.
Tras un total de ocho mangas, la seis veces campeona mundial Mª Antonia Domínguez se ha hecho con el tercer puesto absoluto en categoría femenina, siendo segunda entre las representantes europeas. ‘Anto’, madre de la pentacampeona de la disciplina olímpica del windsurf Blanca Manchón y triple campeona europea, ha acumulado 25 puntos para quedarse a sólo cuatro de la segunda clasificada, la estadounidense Farrah Hall. Por delante, la victoria ha sido para la representante francesa Jeanne Mailhos, con 7 puntos.
En la competición masculina, Curro Manchón, hermano de Blanca, ha logrado la tercera posición en la categoría Ligeros, siendo cuarto en la clasificación general tras la disputa de un total de nueve mangas. Con un sexto puesto como peor resultado parcial, el sevillano, que cuenta en su palmarés con dos oros, dos platas y un bronce en Campeonatos del Mundo de la especialidad, se ha quedado a sólo 0,6 puntos del tercer puesto absoluto, que lograba el francés Christophe Boutet. Por delante, el también galo Nicolas Huguet se ha hecho con el título, seguido del balear Toni Colomar, campeón en la categoría Pesados.
La participación sevillana en el Europeo de Raceboard 2016 la ha completado Francisco Manchón, marido de ‘Anto’ Domínguez y padre de Curro. El que fuera tercer clasificado el pasado año, en cuyo palmarés destacan tres coronas mundiales y dos continentales en veteranos, ha finalizado en la octava posición de su categoría desde el puesto 35º de la general. El regatista más veterano de la competición se vio obligado a no finalizar las dos últimas mangas debido a la fuerza del viento, que soplaba con rachas de más de 20 nudos en la Bretaña francesa.