El C.W. Dos Hermanas-EMASESA ha caído derrotado por 11-12 ante la Escuela de Zaragoza en partido vital por la permanencia en la División de Honor femenina, en la que ocupa la octava y antepenúltima posición. La falta de efectividad del cuadro local en las ocasiones de superioridad ante el colista de la categoría, con sólo dos tantos de nueve, le condena a sufrir en lo que resta de temporada para lograr la salvación.
Las chicas dirigidas por Javier Cortés han encajado un incómodo tropiezo ante un rival directo, sin puntuar hasta la presente jornada, duodécima de la máxima categoría nacional. Y eso que comenzaron con ventaja en el marcador al final de un primer cuarto que finalizaba 4-3.
Pero el cuadro visitante, liderado por la internacional Andrea Blas, de vuelta tras una larga lesión que le ha impedido jugar encuentro alguno durante la primera vuelta, se reactivaba de manera contundente para pasar a dominar el choque antes del descanso. Con un parcial de 1-5, Zaragoza mandaba en el electrónico del Centro Acuático del barrio de Montequinto al descanso (5-8).
El Dos Hermanas-EMASESA, al que le costaba encontrar en ataque a sus dos máximos estiletes, la campeona mundial y europea Lorena Miranda y la internacional cubana Lisandra Frómeta, se empeñaba a pesar de todo en no dejar escapar los puntos. De hecho, lograba situar las tablas en el tercer cuarto tras devolver prácticamente el parcial a su rival con un 4-1 que situaba el 9-9 a falta de los últimos ocho minutos.
Pero estaba claro que el sino del cuadro sevillano de aquí al final del curso es sufrir, cediendo finalmente tras caer en el último cuarto por 2-3. Se escapaban así tres puntos que bien hubieran podido certificar la salvación de forma oficiosa cuando restan seis jornadas para la conclusión de la fase regular.
Javier Cortés: "El equipo no ha estado a la altura de las exigencias de este partido. Zaragoza se jugaba mucho más que nosotras, y eso se ha notado. Ni en defensa ni en ataque hemos podido en un partido en el que nos ha faltado más coraje. Andrea Blas ha asumido la responsabilidad, desde fuera, mientras que a nosotros nos han parado en ataque a Lorena y Lisandra. Nos ha faltado un impulso final, un punto de actitud. Además, los errores en las ocasiones de superioridad han sido decisivos. Así que no queda otra que seguir trabajando y sufriendo hasta el final de la temporada. No es lo mismo tener 9 puntos que los 12 que hubiéramos sumado de ganar. Pero lo mejor es que sigue dependiendo de nosotras".