A la misma hora de la aparatosa caída del rey Juan Carlos también en una reunión con militares.
El príncipe Felipe ha asistido hoy a una exhibición de la capacidad operativa de la Unidad Militar de Emergencias (UME) en el cuartel del II Batallón de esta unidad, en la Base Aérea de Morón de la Frontera (Sevilla), a la misma hora que el Rey Juan Carlos sufría una aparatosa caída en otro acto militar en Madrid.
Don Felipe, con uniforme de campaña, llegó a la base sevillana en un vuelo que tomó tierra minutos antes de la diez y media de la mañana y fue recibido por los jefes de la UME, cuyo Pabellón de Mando está establecido en Morón desde 2007 con un batallón integrado por medio millar de efectivos, de los cuales 21 son mujeres.
El príncipe se dirigió a una explanada donde se desplegó un Pelotón de Intervención en Emergencias Naturales para, en un simulacro de incendio forestal, comprobar varios ejercicios contra el fuego.
En esta primera maniobra intervinieron cuatro camiones contra incendios, un ambulancia de campaña y una quincena de efectivos equipados con material ignífugo que sofocaron un fuego provocado para la exhibición a base de matorral seco.
El ejercicio más complejo fue efectuado por los cuatro camiones en una simulación en la que, supuestamente, la ambulancia había quedado rodeada por el fuego, de modo que los cuatro vehículos formaron un cuadrado rodeando la ambulancia mientras que ubicaron las mangueras en el suelo con aspersores en sus extremos, de modo que formaran paredes de agua que enfriaran el entorno y protegieran de las llamas a los vehículos.
Aunque todos los batallones de la UME poseen formación y material para actuar en todo tipo de emergencias, desde rescate de montaña o urbano, hasta subacuático, en esta época del año está alerta especialmente por el riesgo de incendios forestales.
En su primera visita a la UME de Morón, el príncipe asistió posteriormente a varias demostraciones de rescate urbano, en simulación de asistencia a víctimas de terremoto, de modo que comprobó cómo en apenas unos minutos, los efectivos de la UME rescatan en una camilla a una persona atrapada en unos escombros y en un automóvil volcado sobre uno de sus lados.
Este ejercicio, al igual que el de rescate subterráneo, fue efectuado por miembros del USAR (Equipo de Rescate Urbano por sus siglas en inglés), único de España homologado en diciembre pasado por la ONU para actuaciones de internacionales de este tipo junto con el de la Comunidad de Madrid.
Los efectivos del USAR también horadaron dos paredes de hormigón, simulando un rescate en un edificio colapsado por un terremoto, sacaron un maniquí bajo unos escombros sobre los que reposaba una pared de hormigón y efectuaron ejercicios de entrada a varios edificios colapsados, simulados por acumulación de escombros, algunos de los cuales también apuntalaron.
Tras todas estas simulaciones, que fueron efectuadas al aire libre en menos de una hora, el príncipe recorrió una muestra de la maquinaria pesada y de todos los vehículos con los que cuenta el batallón, desde palas quitanieve a lanchas y camiones contra incendios y a una exhibición canina, ya que en Morón hay siete perros adiestrados.
En los cinco batallones de la UME -Torrejón (Madrid), Bétera (Valencia), Zaragoza y San Andrés de Rabanedo (León), además del de Morón- existe un primer operativo integrado por 24 efectivos que, por turnos semanales, está de guardia 24 horas al día todo el año, para salir en avión en cualquier momento.
Como estos efectivos no pueden moverse de su pabellón, listos y equipados para cualquier emergencia, el príncipe ha tenido que hacerse dos fotos de familia, una con ellos, en sus instalaciones, y otra con el resto del batallón.