
El libro que le desvela los secretos más personales del maestro José Ortega Cano en el mundo taurino, un libro que va más allá de su biografía. El libro donde el maestro cuenta la realidad de un torero.
El gran Gregorio Corrochano Ortega diría de este libro: "¡No se ha podido describir mejor como se forja un torero!" .
"La esencia del toreo y de los sentimientos más personales encerrados en las páginas de este magnífico libro y esperando a que las descubra". Xabier Gabilondo (Periodista).
ORTEGA CANO: la froja de un torero de Ginés Parra Flores
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"Ortega Cano: la forja de un torero". Con un lenguaje muy taurino, el autor nos describe, con detalle, el maravilloso mundo del toro y los desconcertantes altibajos que sufren los artistas en su dura lucha por triunfar. Una dura lucha que habría hecho desistir a alguien con menos temple que el diestro cartagenero. La edición, ampliamente ilustrada, se completa con un brillante prólogo de Inocencio Arias.
Arranca el biógrafo con la emigración de la familia Ortega Cano desde su Cartagena natal a Madrid. José era un chaval. El libro se adentra en la vida del Madrid de los cincuenta y sesenta, José, que aún vende esporádicamente churros de bar en bar para ayudar a la familia, siente la picazón de la festa cuando asiste a un espectácu- lo con su padre.
La carrera de Ortega Cano es desmenuzada con un diálogo a veces chispeante y con los desconcertantes altibajos que sufren los artistas y que habrían hecho desistir a alguien con menos temple que el diestro cartagenero.
El autor nos describe en detalle, esta parte enormemente instructiva y otros momentos de desánimo en los que la tentación de cortarse la coleta debió rondar la mente del matador. José Ortega Cano, afortunadamente, logró la gloria con creces, pero, como muestra la vivaz pluma de Ginés Parra, con avatares de todo tipo. Incluso sinsabores.
GINÉS PARRA FLORES
Valenciano de adopción,pero nacido en la comarca de los Vélez (Almería). Su pasión por el toreo le alejó de sus estudios universitarios, y tras torear varias temporadas de novillero, decidió emprender otras actividades, pero sin remedio, volvió a los toros en las facetas de apoderado y empresario. Tras una dolorosa decepción en el campo del apoderamiento, se despertó en él, su sorprendente condición de poeta, y se lanzó a escribir. Cuenta con varios libros muy toreros, que pronto verán la luz, entre los que destaca su Antología Poética de 60 Toreros y numerosos cuentos recreados en la naturaleza.

