El combinado nacional saltó al campo teniendo claro que el encuentro iba a ser muy largo y duro y por su parte Rusia demostró que respetaba mucho a España. Hammon arrancaba el choque con un triple y parecía que ofrecería su mejor cara al igual que Stepanova, que parecía querer asumir responsabilidades. Korstin puso el 2-7 en el luminoso con poco más de 2 minutos transcurridos. La respuesta española fue un gran trabajo defensivo, con Lima fajándose en ambos tableros para poder salir al contraataque con Montañana y Torrens destrozando así el balance defensivo ruso.
Para equilibrar la contienda sirvió un triple de la alero mallorquina (13-13) y posteriormente Palau pondría por primera vez por delante a España, 17-16 a los 11 minutos. Aún habría más buenas noticias, Nicholls le sacaba la segunda a falta a Stepanova. Tikhonenko se arriesgó manteniéndola en cancha y la apuesta le salió bien ya que la torre del conjunto ex soviético siguió siendo la mejor baza ofensiva de las suyas.
España tenía la paciencia suficiente para realizar buenas selecciones de tiro más allá de la intimidación que generaban Osipova y Stepanova y las españolas tomaron una ligera ventaja 24-19. Torrens intimidaba a Korstin y Abrosimova estaba anulada pero la roja no vio aro en los siguientes 5 minutos. Las torres rusas consiguieron demasiadas segundas opciones, 13 en total, de las que sacaron un gran rendimiento ya que la mitad de los puntos de la primera mitad los cosecharon de esta manera, tras rebote ofensivo. Pese al parón anotador de España, al descanso se llegó con 24-26.
Se confiaba en que el tercer cuarto volviera a ser de la brillantez de los anteriores para las de Evaristo Pérez en el que conseguían dar una vuelta de tuerca a la defensa y ahogar a su rival. Esto lo logró momentáneamente y a eso se le sumó el acierto exterior, en concreto de Torrens, que se convirtió en protagonista con 8 puntos consecutivos, dos triples y una penetración para equilibrar la contienda por dos veces (32-32 y 34-34). Los puntos rusos llegaron en esos minutos desde la línea de tiros libres.
Pero se trataba de Rusia, una selección más estable y con más oficio que las anteriores, que no se permite muchos minutos de relajación. Cuando España más apretaba emergió Hammon para con 5 puntos consecutivos poner a las suyas en 36-43 (min.24). La guerra estaba abierta, Cruz daba un buen relevo a Torrens que cuando volvió a saltar a cancha siguió tan entonada como se había marchado. Pero la selección española necesitaba algo más si quería reducir distancias. Con 42-48 terminó el tercer cuarto.
Se esperaba entonces un final apretado y lleno de tensión pero 6 puntos consecutivos de Hammon y un contraataque de Arteshina sirvieron para endosar a España un parcial de 8-0 y poner contra las cuerdas a la roja. Evaristo Pérez quiso reconducir la situación pidiendo un tiempo muerto pero a la vuelta del mismo otro triple de Hammon ahondaba en la herida española (42-58, min.32). Tocaba remontada y en esas apareció Amaya Valdemoro para tirar del carro español. Las penetraciones de la alero madrileña junto a Torrens hacían creer a España (52-62, min.35) pero de nuevo la base norteamericana torpedeaba la labor española con 6 puntos consecutivos. A partir de entonces a la selección española sólo le quedaba pensar ya en la lucha por el bronce ante Bielorrusia.
ESPAÑA, 61 (13+11+18+19): Lima (3), Palau (6), Aguilar (2), Montañana (10), Torrens (17) cinco inicial- Nicholls (2), Domínguez (-), Sánchez (-), Pascua (2), Abalde (-), Valdemoro (13) y Cruz (6).
RUSIA, 77 (15+11+22+19): Hammon (28), Korstin (2), Stepanova (19), Abrosimova (14), Osipova (8) cinco inicial- Asteshina (6), Kuzina (0), Volkova (-), Karpunina (0), Lisina (0) y Popova (-).
Árbitros: Gianluca Mattioli (ITA), Georgios Tanatzis (GRE), Mehmet Keseratar (TUR).
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