Continúa en la localidad sevillana de Espartinas el II Congreso Nacional de la Federación Española de Sindicatos de Periodistas. La formación de los futuros periodistas y la necesidad de controlar las prácticas de éstos en los medios de comunicación han centrado un debate que abría el decano de la Facultas de Ciencias de la Comunicación, Francisco Sierra Caballero, quien ha defendido la necesidad de limitar el número de centros universitarios donde se imparte esta materia. En la actualidad 35 universidades españolas ofrecen la licenciatura en Ciencias de la Comunicación, lo que supone, en la práctica, que cada año salgan al mercado laboral 9.400 nuevos licenciados. El mercado, ha denunciado Sierra Caballero, está
saturado, por lo que ahora es más necesario que nunca que facultades y empresas de comunicación se coordinen. Sólo el 5% de los estudiantes de comunicación que realizan prácticas terminan integrándose en el mercado laboral como trabajador de pleno derecho.
La implantación del Nuevo Espacio Europeo de Educación Superior, el conocido como Plan Bolonia, va a traer nuevos e importantes cambios en las redacciones. El control de las prácticas que realizan sus alumnos debe ser una prioridad para las Facultades, será la única forma de evitar lo que se ha convertido en una peligrosa rutina: que las redacciones, sobre todo en los medios escritos, se nutran, fundamentalmente, de estudiantes en prácticas.
El decano de la Facultad hispalense de Ciencias de la Comunicación ha apoyado la creación de la Asociación Nacional de Decanos de Facultades de Ciencias de la Comunicación, que sirva para articular una acción común a la hora de regular las prácticas de los estudiantes, ya que, en opinión de Francisco Sierra, el problema de las prácticas (abusos, sustitución de trabajadores por estudiantes en prácticas?) no se pueden resolver localmente. De hecho, ha pedido la unión de universidades, empresas y profesores, así como de los sindicatos integrados en la FeSP, como único camino para dar una salida a los miles de estudiantes de comunicación que anualmente salen al mercado laboral.
También ha habido autocrítica en el debate posterior a la ponencia. Así, se ha puesto de manifiesto la necesidad de que los periodistas en
ejercicio logren la implicación de los estudiantes de comunicación, los futuros periodistas, que éstos vean la realidad de sector con toda
su crudeza.
