La primera parte fue de dominio claro de la Universidad de Sevilla, que conseguía superioridad gracias a los rebotes ofensivos de sus jugadores interiores. De esta forma, lograban rentas por encima de los diez puntos. Por su parte, Cádiz se mantenía en el partido gracias a la aportación ofensiva de Alo Marín.
En los dos últimos minutos del segundo periodo comenzaba la reacción de los gaditanos. Con el equipo sevillano doce puntos arriba, la Universidad de Cádiz logró encadenar dos buenas defensas con tres canastas consecutivas, y reducían la diferencia a 5 puntos antes del descanso.
Tras el paso por vestuarios, Cádiz seguía aprovechándose de la pájara del equipo universitario sevillano que encadenaba una racha de 4 de 14 en tiros libres en este periodo. A ello se sumó la dirección en el juego del equipo de Cádiz de Álvaro Nogueras, que supo leer perfectamente los intereses de su equipo en el partido.
El desconcierto del equipo hispalense se prolongó demasiado. A ello se le sumó algunas decisiones arbitrales en su contra, ya que fueron sancionados con 4 faltas técnicas, dos de ellas a su entrenador Julián Martínez, lo que provocó su expulsión. La Universidad de Cádiz no falló en los momentos finales, y la reacción a la desesperada de la Universidad de Sevilla no funcionó.
Así pues, la Universidad de Cádiz disputará la final mañana viernes a las 12 de la mañana ante la Universidad de Granada, mientras que la Universidad de Sevilla luchará por el tercer puesto a partir de las 10 de la mañana frente a la Universidad de Córdoba.