Creo que profundizando cada día en una FLOR ó frase escrita con el amor más sincero y puro que profesó desde muy niña Angelita hasta convertirse con el paso de los años en Sor Ángela de la Cruz, por el amor a Jesucristo, el Hijo del Padre Dios, llegaremos como no a la Stma. Virgen, la Madre de Jesús y nuestra Madre Celestial Una vez hecha la introducción, analizamos la tercera frase o flor espiritual escrita por Santa Ángela de la Cruz, con ese derroche de amor y confianza puesta en la Stma. Virgen, ella llevo siempre consigo, una bella imagen bajo la advocación de Ntra. Sra. de la Salud y escribió: Tenemos una Madre que, es la de Dios y todo lo puede.
Santa Ángela de la Cruz encomendó en la Virgen de la Salud, todas sus fuerzas y sus alegrías. Cada trabajo que hacía lo encomendaba a Élla, la que siempre fue y sigue siendo en la actualidad la verdadera Madre de las Hermanas de la Compañía de la Cruz y que preside el altar de esa capilla, donde se respira aroma de santidad, armonía y paz, donde podemos venerar al cuerpo incorrupto de nuestra querida Santa Ángela de la Cruz, donde en su horario correspondiente, de 10:00 a 13:00 h y de 17:00 a 19:00 h. no para el transitar de personas que, no dejamos de velarlo. Desde aquí os invito, si no has entrado nunca, en la Casa Madre, experimentará algo nuevo y que para las personas que acudimos con fe, encontraremos siempre un lugar de oración privilegiado, por que, encontrarás el recogimiento, donde el silencio y la fragancia celestial, te invaden los sentidos y sentimientos. Allí podrás encomendarte a Dios, Nuestro Padre, por intercesión de la Virgen de la Salud, Nuestra Madre y de Santa Ángela de la Cruz, estoy plenamente convencido que saldrás con otro ánimo y confortado.
Hoy viernes, ante el fin de semana os he traído también un bello pensamiento de Sor Ángela de la Cruz, extraído de Un tesoro en Vasija de Barro, otro libro pequeño que recoge sus pensamientos, si se hacen, con este magnifico libro, en la pagina 71, encontrarán el pensamiento 154 que transcribimos para ustedes:
Para concluir las virtudes de nuestra Santísima Madre, por las que fue tan regalada de Dios, añadiremos que: Era pobre de espíritu y por este motivo todo le sobraba.
Era humilde y mansa de corazón, y por esto poseyó la tierra.
Lloraba con el que lloraba, y por eso Dios la consoló con gozos indefinibles.
Tenía sed y hambre de justicia, y por esto fue tan completa su santidad, llenando la medida que nuestro Señor le pidió hasta rebosar.
Era misericordiosa, y por esto nuestro Señor la hizo Madre y Reina de esta virtud.
Su corazón estaba limpio y puro de todo afecto que no fuera Dios.
Era la pacífica hija de Dios.
Y por todo esto fue nuestra corredentora y es nuestra mediadora, nuestra madre y nuestro todo.
Yo os recomiendo personalmente que cuando visitéis esa Santa Casa Madre, en la c/Santa Ángela de la Cruz, preguntéis a la hermana que esté en la puerta de entrada, si tiene algún ejemplar de este libro Un Tesoro en Vasija de Barro, donde encontrareis 684 pensamientos sencillos y espontáneos todos, en su forma de escribir, pero que son todos maravillosos.
Por mi parte hasta el lunes 10 de noviembre, si Dios lo quiere que, volveré con otra bella máxima escrita por Sor Ángela de la Cruz y que yo humildemente analizo en recogimiento, pero lanzándola a los cinco continentes, a través de los portales en los que amablemente, me dejan colaborar y aportar un pequeño granito de arena, pero ten presente que si unimos los vuestros y los míos, formaremos una orilla tranquila junto al mar, para caminar cada día, hasta que Dios, nos lo permita.
Feliz fin de semana a todos amigos lectores de este portal. Os la flor es el jazmín, son blancas, sencillas, puras y con un olor suave y muy andaluz.