Era el año 1981 cuando Domingo Pérez decide abrir las puertas del primer Sato. Por aquel entonces, en este centro deportivo situado en la trianera calle de Santa Cecilia era el único en el que se empezaron a usar las máquinas selectorizadas por grupos musculares una auténtica revolución deportiva.
Apenas seis años después, en 1987 la prolongación de la calle López de Gomara con motivo de las obras de la Expo92, que cambió la fisonomía de toda la ciudad, le tocaron de pleno al centro deportivo. Hubo que trasladarse. El nuevo Sato Triana se ubicó entonces en la calle San Jacinto. Poco después, la demanda de los socios hizo que se abrieran las puertas de un nuevo centro, Sato Nervión, al que siguió Sato Meliá, situado dentro de las instalaciones del hotel del mismo nombre con un objetivo claro: que los hombres de negocios y los visitantes del hotel pudieran disfrutar del deporte durante su estancia. Y se dio un nuevo salto cualitativo: se incluyeron nuevas actividades, como squash, zona de aguas con sauna, jacuzzi, sauna finlandesa y actividades colectivas como aeróbic, step y fitness.
Pero es en el año 1994 cuando se da el gran salto y se crea el Club Sato Mairena en el Parque Empresarial PISA a partir del antiguo Pista Sport. De esta manera se dispone por primera vez en la provincia de Sevilla de unas instalaciones de primer nivel, siendo en la actualidad uno de los clubes con más pistas de padel de toda Sevilla. Este centro deportivo se convierte en la estrella del deporte de la ciudad desde su puesta en marcha, no sólo por las excepcionales instalaciones con las que cuenta, sino también por la filosofía que se plasma en el club. La intención de ser mucho más que un club se traduce en el trato familiar y personalizado a los socios y en una constante apuesta por la innovación, de manera que los socios han contado siempre con todo lo necesario para estar a la última en el mundo del deporte. Las actividades se han convertido en uno de los pilares fundamentales de la forma de ser del club, con profesionales de primera línea en cada una de las modalidades deportivas que se imparten en el club: padel, squash, fitness, musculación, aeróbic, taekwondo, step, estiramientos, pilates, tai chi, yoga una lista casi interminable porque cada temporada se mejora la oferta deportiva para los socios. Y junto a las actividades, cursillos para niños, ancianos o de rehabilitación en natación, zona de aguas, servicios médicos especializados, estética, peluquería y restauración Toda una gama de opciones para cuidar cuerpo y mente en un centro deportivo que se ha consolidado como mucho más que un club.
El 1 de julio de 2004 el centro Sato Sport Santa Justa, situado en la calle José Laguillo esquina con Pablo Iglesias, es la materialización de un sueño, el de construir uno de los tres centros deportivos más grandes de toda Europa situado dentro de un casco urbano. En sus casi 20.000 metros cuadrados se reparten las últimas tecnologías deportivas y un equipo especializado en medicina del deporte de primer nivel y equipado con la más alta tecnología para la detección precoz de las enfermedades cardiovasculares y musculares.
Y en la actualidad el último gran proyecto lo supone el centro Sato Sport Alcalá, ubicado en Alcalá de Guadaíra, en una parcela de 32.000 metros cuadrados y con 6.000 metros cuadrados de superficie donde los alcalareños van a tener a su alcance mucho más que un club.
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