Todo es un problema de comunicación o ¿No es verdad que todos amamos nuestras familias, nuestra tierra y nos aferramos a esta vida por más que nos la pinten como la peor de las vidas?...
Pues de esta reflexión nace La misa de la alegría.
Cuando me puse en marcha para hacer este disco había cosas que tenía muy claras: Necesitaba llenarme de Jesús, del Jesús hombre que vivió entre nosotros y que es una referencia indiscutible para la historia de la humanidad, para los creyentes y para los que no lo son. En su mensaje se resume todo lo que el ser humano anhela para llenar su vida: Amarás a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a ti mismo.
A Dios, en nuestro planeta, podemos llamarlo e interpretarlo de muchas formas, pero hay una en la que todos coincidiremos: DIOS ES AMOR. Y el amor es lo único que puede hacer que este mundo sea un poco mejor La música, también es una, y también existen infinitas formas de interpretarla.
PUES ESO ES LO QUE PRETENDE ESTA MISA DE LA ALEGRÍA: LANZAR AL MUNDO, A TRAVES DE LA MÚSICA, UN MENSAJE DE BRAZOS ABIERTOS, DE AMOR A LA VIDA Y SOBRE TODO, DE OPTIMISMO.
Desde que comencé a pensar en esta historia de La misa de la alegría sentí que alguien me acompañaba en el proyecto. Es todos estos meses de trabajo nunca me he sentido solo.
Alguien iba por delante mía abonando el terreno para que cada idea que surgía se llevara a cabo: alguien que inspiraba mis canciones y me invitaba a escribirlas sin apenas esfuerzo. Alguien que me condujo a Kiko Fuentes, figura clave para que este disco lo tengas hoy en tus manos, alguien que me puso en el camino a Oscar Gómez, mi querido compañero de viaje, para que nos complementáramos casi de manera mágica en la composición y la producción de esta obra
Alguien que me llevó a Senegal para traerme su música a mi tierra, para dejar la música de mi Andalucía en África, con toda la sencillez y la naturalidad del mundo.
Alguien que puso su empeño en que me encontrara en Senegal con la Hermana Esperanza Oliver en el día más feliz de su vida. Fue en la ciudad de Kaolack, el día que tomaron los votos las dos primeras religiosas nativas de la congregación que Esperanza fundó en Senegal hace 27 años ya. Es imposible contar con palabras de lo que fui testigo en esa celebración, pero quizá os pueda dar una idea si os digo que tuve la oportunidad de ver, sentir y compartír el amor en estado puro Un Amor con mayúsculas, diferente a todos los que he sentido antes, un amor desinteresado y limpio, un amor traducido en entrega a los demás, un amor traducido en alegría
Senegal para un europeo, es un país duro, por el calor sofocante y por las carencias de comodidades a las que estamos acostumbrados.
Pero curiosamente en Senegal he podido comprobar cómo conviven en absoluta armonía musulmanes y católicos, en Senegal no he sentido inseguridad alguna, me he sentido querido y honrado con una hospitalidad desinteresada y sincera
Ese alguien al que antes me refería, también quiso llevarme mas tarde a Centroamérica, en concreto a Nicaragua, para encontrarme con el maestro Carlos Mejía Godoy, creador de la misa campesina nicaragüense, traducida a 8 idiomas, a la cual queríamos rendirle un humilde homenaje con su presencia en nuestro disco. Carlos puso su voz en la Oración de la mesa: una hermosa canción, bendición de la comida, que el mismo compuso en ritmo de son de pascua nicaragüense.
Compartí con él tres días inolvidables, nada más conocerlo me impregné de su arte y de su hermosísimo país.
Carlos es una leyenda viva, con un carisma impresionante.
Sus canciones, son las canciones que canta su pueblo. El amor por su país y por su folklore, su compromiso social y artístico le han brindado una inmensa popularidad y respeto.
Carlos estaba aún convaleciente de una molesta operación y se levantó de la cama para enseñarnos su Nicaraguita. Nos llevó a Masaya donde su alcalde me honró en representación de Siempre Así, con el título de visitante distinguido. Y nos enseñó su barrio más popular, Monimbó, cuna del folklore nicaragüense.
Carlos nos paseó por la majestuosa Granada y nos regaló un espectacular sólo de marimba en la bella Caterina. compartió con nosotros en su casa, La casa de los Mejía Godoy, familia, gallopinto y música, sobre todo mucha música
Alguien también quiso que Jesús Quintero, Yanela, Antonio García Barbeito, Juan Rafael Pérez y Alejandro Vega, en definitiva, todos los artistas que pensamos podían engrandecer esta obra nos dieran su si quiero con sólo sugerírselo
Hay un antes y un después en mi vida con La Misa de la Alegría.
A ese alguien que me ha ido marcando los tiempos, lo he podido ver, tocar y sentir gracias a este disco, y también puedo decir que merece la pena acercarse y conocerle de cerca.
Soy el ser más afortunado de la tierra porque en este caso Él ha sido el que me ha brindado a mi la oportunidad de expresar todo eso que estaba dormido en mi interior y ahora ve la luz en forma de música.
A Él y a mi abuela Isabel, que puso todo su empeño en que le conociera, quisiera dedicarle esta MISA DE LA ALEGRÍA.
Rafa Almarcha