Desde el viernes por la tarde, la Duquesa de Alba se encuentra en su casa sevillana de Dueñas, recuperándose de la operación a la que se sometió el pasado martes 10 de abril. El doctor Trujillo, al que llegó a través de sus amigos Curro Romero y Carmen Tello fue quien la operó con éxito. Cayetana de Alba llevaba varios meses con molestias en la pierna, su diagnóstico era estenosis de canal, es decir un estrechamiento en la parte inferior de la columna por donde pasan los nervios que van hasta las piernas, por eso cada vez tenía más dificultades para caminar.
El doctor Trujillo le propuso operarla durante la semana Santa pero fue ella quien decidió posponerlo, para poder recibir en su casa a la Hermandad de los Gitanos en la Madrugá del Jueves Santo. Es tradición en la casa de Alba salir a hacer una ofrenda floral al paso de Nuestro Padre Jesús de la Salud y María Santísima de las Angustias, de la que es Camarera Mayor la Duquesa. Este año además,Cayetana forma parta de la Junta directiva de dicha Hermandad y tenía mucho interés en cumplir con su devoción. Finalmente no pudo ser, su delicada situación hizo que fuera representada por su hijo mayor, el Duque de Huéscar. La Duquesa siempre ha sido una mujer de carácter, con mucha personalidad y una enorme vitalidad. Su hija Eugenia, recordaba una anécdota que le ocurrió con ella el año pasado al regresar de Japón: Mi madre nos pega un repaso a todos,me tiene alucinada. Me acuerdo el viaje a Japón, que fueron doce o quince horas y fue llegar a Madrid y ella se cogió una Ave y se fue a Sevilla y luego a Ronda, yo me tuve que ir a casa y echarme un rato porque no podía con mi alma, a este paso nos va a enterrar a todos. Cuando se le pregunta si no le gustaría que llevara una vida más tranquila, sonriendo Eugenia asegura:- yo encuentro que hace fenomenal, ella siempre ha sido una mujer muy vital, que no puede parar y es feliz así, haciendo cosas, estando con sus amigos y me parece estupendo y ojalá me pase a mí cuando llegue a su edad.
Todos sus hijos y sus amigos más íntimos han estado junto a la Duquesa. El día del ingreso llegó con Eugenia y su nuera Genoveva Casanova. Después de manera más o menos discreta fueron apareciendo todos, Alfonso, el mayor, Duque de Huéscar y que intentó pasar desapercibido, Alfonso, Duque de Aliaga, el más desconocido, Jacobo, Conde de Siruela casado con la periodista Inka Martí, Fernando, Marqués de Cabeza de Vaca, el único soltero, Cayetano, Conde de Salvatierra y por supuesto Eugenia, Duquesa de Montoro. Tampoco han faltado sus nietos más pequeños, Cayetana la hija del torero Francisco Rivera, y los mellizos Luis y Amina, ni sus amigas de toda la vida, la Marquesa de Saltillo, Isabel Herce, esposa de Antonio Burgos, Carmen e Isabel Cobo o Ana Abascal. Todos han querido dar su apoyo a Cayetana. Es que ella es especial para todo,recuerdan sus amigas, siempre está haciendo planes, le gusta mucho reunirse con nosotras para comer, ir al cine y sentirse arropada, es una persona muy sensible y tremendamente detallista.
La rehabilitación ahora tendrá una duración de unos dos meses, pero Cayetana ya ha hablado sobre la posibilidad de ir a la Feria de Abril dentro de diez días. Ver a la Duquesa paseando por el Real en coche de caballos es una estampa tradicional. El año pasado incluso volvió a vestirse de flamenca con un traje del diseñador Cristo Báñez. Todas las tradiciones de Sevilla le encantan y es la primera en participar en la vida de la ciudad:
- es que yo me siento sevillanadice siempre con orgulloen mi casa de Dueñas, fue mi puesta de largo, en Sevilla me casé por primera vez y aquí he vivido algunos de los momentos más bonitos de mi vida
NOBLEZA OBLIGA
La Duquesa de Alba tuvo el viernes la opción de abandonar la Clínica desde el parking y evitar así ser fotografiada, ella lo rechazó y decidió salir por la puerta principal, se levantó de la silla de ruedas que la condujo hasta la puerta y entró por su propio pie en el coche que la esperaba junto a Carmen Tello. Cayetana quiso agradecer así el interés a los medios de comunicación y a las personas que estaban esperando su salida. No es la primera vez, también en la boda de su hijo Cayetano que se celebró en el palacio de Dueñas, no tuvo ningún reparo en salir a la puerta , vestida con un modelo de inspiración goyesca de Tony Benítez, para saludar a los medios y dar su opinión de la ceremonia religiosa en la cual fue la madrina. Esas actitudes son las que han hecho de ella una persona cercana y muy querida en Sevilla.