El diestro recibió el alta médica a primera hora de la tarde de ayer, tras un nuevo reconocimiento médico en el que el doctor Carlos Val Carreres estimó que podía viajar a su domicilio para seguir bajo cuidados médicos, dieta y medicación hasta que remita la fiebre. Rivera Ordóñez había viajado a Zaragoza y comenzó a sentir molestias, vómitos y fiebre alta a las tres de la madrugada, en la habitación del hotel.
No obstante, y dado el compromiso importante de la Feria de El Pilar, su cuadrilla llegó al sorteo de los toros, en la mañana del día 11. A la una del mediodía la fiebre había subido y no toleraba ningún alimento líquido o sólido, razón por la que el médico de la plaza de toros de la Misericordia decidió su ingreso hospitalario, en donde permaneció con suero hasta el mediodía de ayer.
Rivera Ordóñez piensa cumplir sus dos compromisos que le quedan, el domingo en Alba de Tormes (Salamanca) y en la feria de San Lucas de Jaén el día 18, fecha en la que cierra una temporada en la que quedará en el segundo puesto del escalafón de matadores con 77 corridas de toros en su haber. "Él está bastante mejor. Ya se ha levantando de la cama y corretea por allí. Si todo sigue así, estará el domingo en Alba de Tormes y luego el martes en Jaén", ha declarado a mundotoro su apoderado Manolo González.