Las razones de esta negativa son, sobre todo, deportivas, al considerarse a Iker Iturbe como una pieza clave en los esquemas del cuadro colegial para la próxima temporada. Iturbe, por tanto, se queda por ahora en el club de Ramiro de Maeztu, que ayer hizo oficial su cuarto fichaje del verano, el del escolta Javier Mendiburu, que será jugador estudiantil para las próximas dos campañas, con opción a una tercera. Con esta incorporación, Juan Antonio Orenga, técnico colegial, ya tiene perfilada su plantilla, a falta tan sólo de saber qué sucederá con Andrae Patterson.
Otro club al que le faltan sólo unos flecos para cerrar su equipo es el Granada. La entidad nazarí anunció ayer la contratación del norteamericano Corsley Edwards por una temporada. Edwards, de 26 años y 2,06 metros, procede del Fenerbahce turco y cuenta, como muchos otros jugadores que han recalado este verano en la ACB, con experiencia en la NBA, más concretamente en los Orlando Magic. Esta adquisición podría cerrar las puertas del Granada a Zan Tabak, que sigue entrenando en Croacia a la espera de una llamada del Unicaja. El center balcánico, pretendido también por el DKV Joventut, confía en poder continuar en Málaga un año más, ante las dificultades que está teniendo el Unicaja para encontrar un pívot de garantías.
Menos problemas para fichar a un pívot ha tenido el IBB Menorca, que, tras descartarse casi definitivamente la opción de Boniface NDong, ha fichado a un viejo conocido de la ACB, el estadounidense Bud Eley, que el año pasado jugó en el Granada. Otro norteamericano que podría recalar en breve en España es Aloysius Anagonye, que se encuentra en la órbita del Ricoh Manresa, que ayer presentó a una de sus escasas incorporaciones, Eduard Riu. El joven pívot catalán aseguró que tratará de hacer equipo y ayudar en lo que pidan, ganar minutos y confianza del entrenador.